1. ¿Qué es el Método Suzuki?
El Método Suzuki está basado en el aprendizaje de la Lengua Materna. Los niños, desde antes de su nacimiento, están rodeados por los sonidos del idioma de su madre y aprenden a hablar con gran exactitud, para lo que es necesaria una gran capacidad auditiva. Shinichi Suzuki pensó que si los niños estuvieran rodeados de sonidos musicales, podrían desarrollar una habilidad tan extraordinaria en la música como la que desarrollan en el lenguaje.
Suzuki llama a su método Educación del Talento y se basa en la idea de que el talento no es algo innato, privilegio de unos pocos, sino que con la educación adecuada puede desarrollarse en cada niño más allá de lo que cabría esperar. Como en el aprendizaje de la lengua materna, el ritmo de avance viene dictado por el niño y no por la edad u otros factores. Un niño empieza a andar cuando está físicamente preparado para ello y es imposible enseñarle antes. Este hecho es aceptado con naturalidad, pero no todos son respetuosos con el ritmo personal de cada niño, que no tiene por qué ser e´de su compañero más destacado. Si el niño es respetado y alentado, desarrollará una personalidad más equilibrada, sin contar con la habilidad musical desarrollada.
Los niños aprenden a hablar antes que a leer. La música es un medio sonoro como el lenguaje, por lo que a los alumnos Suzuki no se les pide conocer solfeo para reproducir las piezas. El solfeo se introduce cuando el niño ya ha desarrollado su habilidad para escuchar y reproducir los sonidos musicales.
Otras de las ventajas de este método es el desarrollo de la capacidad para memorizar y retener fácilmente. En el estudio tradicional, los alumnos no memorizan más que de vez en cuando, de forma que es una capacidad no estimulada ni desarrollada. Los niños que siguen el Método Suzuki aprenden a memorizar y reproducir ritmos y melodías desde el principio gracias a la escucha.
Se comienza con piezas cortas que el alumno va memorizando y reteniendo. Progresivamente se van introduciendo piezas más largas, manteniendo las piezas anteriores, por lo que se ejercita constantemente la memoria. El resultado de este método de trabajo es que, de una manera fácil y progresiva, el alumno acaba memorizando sonatas de cuatro movimientos tan cómodamente como si fuese una canción folklórica de cuatro frases.
El entrenamiento de la memoria y la concentración se transmite al trabajo instrumental, logrando que la interpretación en el instrumento sea muy fluida. Durante el periodo de preparación de audiciones o conciertos, la manera de tocar de los niños mejora, agudizando la concentración y agilidad. Este entrenamiento repercute claramente en la mejora de su trabajo y aprovechamiento escolar.
Principios del Método Suzuki:
ESCUCHA:
Los niños aprenden a hablar escuchando a sus padres. Para aprender a tocar un instrumento desde pequeños, es necesario escuchar música repetidamente.
REPETICIÓN:
Al igual que se repiten las primeras palabras al aprender a hablar, la repetición es fundamental para que la ejecución se perfeccione y se pueda pasar a ejercicios más complicados.
IMITACIÓN:
Los niños escuchan las palabras de sus padres y tratan de imitarlas sin saber qué significan, de este modo logran repetir sonidos y palabras. Lo mismo ocurre con las melodías y con la ejecución instrumental.
REFUERZO POSITIVO:
Es fundamental que los niños practiquen en un entorno que les aplauda los progresos por pequeños que sean para que la motivación sea mayor.
POSPONER LA LECTURA:
Los niños aprenden a leer partituras cuando han desarrollado su habilidad para escuchar y reproducir los sonidos musicales.
RITMO DE APRENDIZAJE:
Cada niño debe seguir su ritmo de aprendizaje individual, por lo que es necesario tener paciencia y respetarlo.
CLASE INDIVIDUAL:
La clase individual está enfocada a atender la evolución del alumno y a trabajar asuntos técnicos.
CLASE EN GRUPO:
Para compartir la música con otros niños, escuchar cómo tocan, seguir el ritmo, aprender por imitación... además de contribuir a su desarrollo social en un entorno educativo positivo.
El papel de los padres:
Los padres Suzuki adquieren un gran compromiso, dado que deben asistir a todas las clases con su hijo y practicar diariamente. También se les pide que el niño escuche música en casa, principalmente las piezas, canciones y obras que aprenderán en el instrumento. Durante la clase con el profesor, el padre o la madre permanece con el niño para aprender las bases del trabajo que se va a realizar, así, podrá ayudarle en la práctica diaria en casa.
Para alcanzar los mejores resultados, la práctica debe estar rodeada del mejor ambiente y entorno posible, una atmósfera cariñosa y positiva, lo que no es tarea fácil para padres muy ocupados, pero merece la pena invertir en los niños todo el tiempo, la energía y, sobretodo, el amor que seamos capaces de darles.
El Método Suzuki, enriquece el papel educador de los padres a través de la música, dando lugar a una relación padre-hijo más completa y humana, que será muy importante en todos los ámbitos de la vida.
El Profesor:
El profesor forma parte del entorno de aprendizaje y debe tener una actitud de apoyo, motivación y amor hacia el niño. Es necesario que haya entendido perfectamente que el Método Suzuki no es simple método del que se compran los cuadernos o partituras para seguir la enseñanza de unas piezas como en cualquier método tradicional. Los libros Suzuki no dan ninguna indicación sobre la manera de enseñar, ya que se da por supuesta la formación especializada y exhaustiva del profesor.
Las clases:
- Clase individual: Se trabaja principalmente aspectos técnicos de forma personalizada con cada alumno. También se guía y orienta a los padres para que los alumnos tengan el máximo apoyo en la práctica diaria en casa.
- Clase colectiva: Se refuerza lo aprendido en las clases individuales a la vez que se ofrece una formación musical general. Otro objetivo es compartir la música con otros niños, escuchar como tocan, seguir el ritmo, aprender por imitación... además de contribuir a su desarrollo social.
Más información sobre el Método Suzuki y los profesores federados:
Federación Española Método Suzuki
European Suzuki Association
Suzuki llama a su método Educación del Talento y se basa en la idea de que el talento no es algo innato, privilegio de unos pocos, sino que con la educación adecuada puede desarrollarse en cada niño más allá de lo que cabría esperar. Como en el aprendizaje de la lengua materna, el ritmo de avance viene dictado por el niño y no por la edad u otros factores. Un niño empieza a andar cuando está físicamente preparado para ello y es imposible enseñarle antes. Este hecho es aceptado con naturalidad, pero no todos son respetuosos con el ritmo personal de cada niño, que no tiene por qué ser e´de su compañero más destacado. Si el niño es respetado y alentado, desarrollará una personalidad más equilibrada, sin contar con la habilidad musical desarrollada.
Los niños aprenden a hablar antes que a leer. La música es un medio sonoro como el lenguaje, por lo que a los alumnos Suzuki no se les pide conocer solfeo para reproducir las piezas. El solfeo se introduce cuando el niño ya ha desarrollado su habilidad para escuchar y reproducir los sonidos musicales.
Otras de las ventajas de este método es el desarrollo de la capacidad para memorizar y retener fácilmente. En el estudio tradicional, los alumnos no memorizan más que de vez en cuando, de forma que es una capacidad no estimulada ni desarrollada. Los niños que siguen el Método Suzuki aprenden a memorizar y reproducir ritmos y melodías desde el principio gracias a la escucha.
Se comienza con piezas cortas que el alumno va memorizando y reteniendo. Progresivamente se van introduciendo piezas más largas, manteniendo las piezas anteriores, por lo que se ejercita constantemente la memoria. El resultado de este método de trabajo es que, de una manera fácil y progresiva, el alumno acaba memorizando sonatas de cuatro movimientos tan cómodamente como si fuese una canción folklórica de cuatro frases.
El entrenamiento de la memoria y la concentración se transmite al trabajo instrumental, logrando que la interpretación en el instrumento sea muy fluida. Durante el periodo de preparación de audiciones o conciertos, la manera de tocar de los niños mejora, agudizando la concentración y agilidad. Este entrenamiento repercute claramente en la mejora de su trabajo y aprovechamiento escolar.
Principios del Método Suzuki:
ESCUCHA:
Los niños aprenden a hablar escuchando a sus padres. Para aprender a tocar un instrumento desde pequeños, es necesario escuchar música repetidamente.
REPETICIÓN:
Al igual que se repiten las primeras palabras al aprender a hablar, la repetición es fundamental para que la ejecución se perfeccione y se pueda pasar a ejercicios más complicados.
IMITACIÓN:
Los niños escuchan las palabras de sus padres y tratan de imitarlas sin saber qué significan, de este modo logran repetir sonidos y palabras. Lo mismo ocurre con las melodías y con la ejecución instrumental.
REFUERZO POSITIVO:
Es fundamental que los niños practiquen en un entorno que les aplauda los progresos por pequeños que sean para que la motivación sea mayor.
POSPONER LA LECTURA:
Los niños aprenden a leer partituras cuando han desarrollado su habilidad para escuchar y reproducir los sonidos musicales.
RITMO DE APRENDIZAJE:
Cada niño debe seguir su ritmo de aprendizaje individual, por lo que es necesario tener paciencia y respetarlo.
CLASE INDIVIDUAL:
La clase individual está enfocada a atender la evolución del alumno y a trabajar asuntos técnicos.
CLASE EN GRUPO:
Para compartir la música con otros niños, escuchar cómo tocan, seguir el ritmo, aprender por imitación... además de contribuir a su desarrollo social en un entorno educativo positivo.
El papel de los padres:
Los padres Suzuki adquieren un gran compromiso, dado que deben asistir a todas las clases con su hijo y practicar diariamente. También se les pide que el niño escuche música en casa, principalmente las piezas, canciones y obras que aprenderán en el instrumento. Durante la clase con el profesor, el padre o la madre permanece con el niño para aprender las bases del trabajo que se va a realizar, así, podrá ayudarle en la práctica diaria en casa.
Para alcanzar los mejores resultados, la práctica debe estar rodeada del mejor ambiente y entorno posible, una atmósfera cariñosa y positiva, lo que no es tarea fácil para padres muy ocupados, pero merece la pena invertir en los niños todo el tiempo, la energía y, sobretodo, el amor que seamos capaces de darles.
El Método Suzuki, enriquece el papel educador de los padres a través de la música, dando lugar a una relación padre-hijo más completa y humana, que será muy importante en todos los ámbitos de la vida.
El Profesor:
El profesor forma parte del entorno de aprendizaje y debe tener una actitud de apoyo, motivación y amor hacia el niño. Es necesario que haya entendido perfectamente que el Método Suzuki no es simple método del que se compran los cuadernos o partituras para seguir la enseñanza de unas piezas como en cualquier método tradicional. Los libros Suzuki no dan ninguna indicación sobre la manera de enseñar, ya que se da por supuesta la formación especializada y exhaustiva del profesor.
Las clases:
- Clase individual: Se trabaja principalmente aspectos técnicos de forma personalizada con cada alumno. También se guía y orienta a los padres para que los alumnos tengan el máximo apoyo en la práctica diaria en casa.
- Clase colectiva: Se refuerza lo aprendido en las clases individuales a la vez que se ofrece una formación musical general. Otro objetivo es compartir la música con otros niños, escuchar como tocan, seguir el ritmo, aprender por imitación... además de contribuir a su desarrollo social.
Más información sobre el Método Suzuki y los profesores federados:
Federación Española Método Suzuki
European Suzuki Association
